Los inmuebles viejos tienen mucho encanto: son construcciones arquitectónicas únicas y con un gran valor histórico. ¿Cuáles son los aspectos a tener en cuenta al comprar una casa antigua? Si quieres hacerte con una propiedad de estas características, toma nota de algunas consideraciones previas.
¿Por qué comprar una casa antigua?
Muchas personas sueñan con tener una casa antigua porque tiene mucho encanto, suelen ser espaciosas y tienen un alto valor histórico y arquitéctonico. Por ejemplo, una cassa antigua puede ser muy fresca y es perfecta si vives en una ciudad muy cálida durante el verano; también pueden ser fáciles de calentar cuando llegan las bajas temperaturas.
Una casa antigua puede ser una buena inversión, pero cuidado, porque puede ser que necesite reformas consdierables. Así que antes de tomar una decisión tan a la ligera, lo mejor es que consideres algunos de los aspectos a tener en cuenta al comprar una casa antigua. Con estas recomendaciones a mano, puedes saber si el inmueble que quieres adquirir te resulta o no rentable a largo plazo.

¿Qué debes considerar antes de comprar una casa vieja?
Estado de la vivienda y edificación
Uno de los aspectos a tener en cuenta al comprar una casa antigua es el estado de la misma y del edificio en la que se encuentra, cuando se trata de un piso. La estructura de la casa, así como las instalaciones de la misma son fundamentales al momento de comprar la casa. Si no están funcionando en óptimas condiciones, es 100% probable que necesiten una reforma considerable y esto puede afectar tu presupuesto.
Antes de decidirte por la vivienda de tus sueños, verifica que las instalaciones básicas como agua, electricidad y calefacción funcionen bien. Si no, tendrás que sustituirlos y ya significa un gasto para tu bolsillo. Si no se encuentran en buen estado, puedes negociar con el vendedor una bajada del precio.
Los cimientos también son fundamentales al momento de escoger la vivienda; verifica el estado del tejado y los muros; si la casa tiene o no humedades y/o goteras. Si puedes, contrata los servicios de un arquitecto o perito, incluso de un tasador a ser posible.
¿Casa para reformar o no?
Supongamos que consigues que el vendedor te haga una rebaja en el precio de la vivienda para que puedas hacer algunas reformas. Pero antes de firmar ningún contrato, verifica que sea posible hacer las reformas pertinentes en la vivienda; y es que algunas edificaciones antiguas pueden formar parte del llamado patrimonio histórico de la ciudad.
Si la ley protege el inmueble, entonces es posible que no puedas hacer ninguna reforma. ¿Cómo hacerlo? ¡Consulta las características del inmueble en el Registro de la Propiedad! Solo necesitarás la referencia catastral para poder hacer la consulta.
Ten en cuenta que la ley sí permite hacer algunas reformas parciales en el interior. Si no quieres cambiar la fachada, que es lo que suele estar protegido, entonces no tendrás problemas en sustituir las calderas, cableado y tuberías.
El uso de la vivienda
Hay ocasiones en las que una vivienda protegida exige al nuevo comprador que el inmueble mantenga su estatus de uso original. Es decir, si compras una casa antigua para montar un hotel o casa de huéspedes; una cafetería, restaurante o librería, quizá no puedas hacerlo. Y lo mismo ocurre si el inmueble solía ser una biblioteca o un colegio y ahora lo quieres para vivir.
Este es uno de los aspectos a tener en cuenta al comprar una casa antigua y lo más aconsejable es verificarlo en una nota simple registral.

Calcula bien tu presupuesto
Una casa antigua es preciosa, pero puede acarrear muchos quebraderos de cabeza si no verificas el estado del inmueble antes de comprarlo. Además de las restricciones y condiciones de las instalaciones es posible que te encuentres con algunas sorpresas desagradables. Antes de decidirte por una cassa antigua, calcula un presupuesto suficientemente amplio para imprevistos.
El valor del inmueble también varía en función de su antigüedad. No es lo mismo una casa de 20 o 30 años que una de 50 o 60 de antigüedad. Verifica el estado de la vivienda y si puedes o no hacer reformas y de acuerdo con esto, calcula tu presupuesto y lo que puedes asumir. Ten en cuenta también que en estos casos no basta con pagar el precio del inmueble, sino también los gastos que acarrea una compraventa (notario, impuestos, entre otros) y por supuesto, posibles reformas.
Algunos aspectos a tener en cuenta al comprar una casa antigua
Además de las recomendaciones que te hemos dado anteriormente, cuando vayas a la casas antigua de tus sueños y que quieres comprar, verifica:
- Que las puertas y ventanas se abran correctamente.
- Verificar los alicatados de baños y cocinas. Si suenan huecos, hay problemas y es posible que haga falta una reforma.
- Comprobar las humedades. Si son en el techo, es posible que sea problema del vecino del piso de arriba. Es importante estudiar el origen de estas humedades, pues pueden afectar la edificación.
- Comprueba el estado de los suelos. El suelo de una casa no suele aguantar durante mucho tiempo. Comprueba que éste no se desprenda, cuando se trata de baldosas; y si es madera, que ésta no esté podrida.
- Termitas y plagas. Las termitas no son visibles al entrar a una casa antigua, pero muchos edificios viejos suelen tener estos problemas. Las termitas y otras plagas forman parte de los llamados vicios ocultos de la compraventa, lo que supone que en el futuro tengas que hacer un desembolso para subsanar estos problemas.