Las viviendas de protección oficial o VPO son una alternativa para vivir, pero ¿Cómo comprar una VPO de segunda mano? ¿Es posible hacerlo? Aunque a priori estas viviendas están diseñadas para las personas con escasos recursos, cualquier persona puede adquirirlas, siempre y cuando se reúnan ciertos requisitos.
Requisitos para comprar una VPO de segunda mano
Las viviendas de protección oficial se diseñaron para que aquellos grupos vulnerables y con escasos recursos pudieran acceder a una vivienda digna. Es por eso que las VPO se caracterizan por sus precios reducidos. Aunque este tipo de inmuebles se destinan a personas con escasos recursos, cualquiera puede acceder a los mismos siempre que se reúnan una serie de condiciones sobre la vivienda.

Para empezar, cuando el período de VPO termina, cualquiera puede solicitar la compra del mismo. Es decir, una vivienda VPO tendrá esta denominación durante un período, cuando este período concluye, entonces la vivienda se pone en venta para todo el público. No es necesario cumplir ningún otro requisito más que contar con el dinero suficiente para la adquisición del inmueble. Sin embargo, puede ocurrir que la denominación VPO siga en vigor. ¿Qué ocurre en estos casos?
Solicitar una autorización para vender
La regla general de las VPO es que no pueden venderse hasta que la denominación VPO no se retire del inmueble. Sin embargo, hay excepciones. Una vivienda de protección oficial, que aún cuente con esta calificación, puede venderse cuando cuente con una autorización expresa de la administración; además, debe venderse con un precio establecido y no rebajado.
Para poder comprar una VPO de segunda mano que aún conserve su calificación, es necesario presentar un justificante por el cual se pone el inmueble en venta. Esto debe tramitarlo el propietario de la vivienda, alegando las razones por las cuales quiere vender el inmueble. Esto puede ser por aumentar la familia y que la vivienda le quede pequeña, por cambio de residencia, etcétera.
¿Qué necesitas para comprar una VPO de segunda mano?
Siempre que la VPO siga teniendo esta calificación, es necesario cumplir con una serie de requisitos específicos, pero cuando la VPO deja de considerarse vivienda de protección oficial, no es necesario cumplir ninguna condición. Entonces, si la VPO tiene su calificación, el comprador deberá:
- Presentar empadronamiento en la Comunidad Autónoma en donde se encuentre el inmueble. El empadronamiento se tramita en el Ayuntamiento y para ello es necesario contar con una vivienda habitual en la ciudad, generalmente, de alquiler; en este caso, se presenta contrato de arrendamiento.
- Inscribirse como demandante de VPO en la Comunidad Autónoma donde se localice el inmueble.
- No es posible ser titular de otra vivienda. Ni el propietario ni ningún otro miembro de la unidad familiar pueden tener otro inmueble.
- Destinar el inmueble como residencia habitual y permanente. Es decir, después de adquirirlo, no es posible arrendarlo. Tampoco puede utilizarse como segunda residencia ni como oficina.
- No superar la Renta Mínima Anual de la comunidad en la que esté el inmueble.
- No haber sido beneficiario de ayudas en materia de viviendas por parte del Estado, dentro del período de 10 años anteriores a la solicitud.
¿Por qué comprar una VPO de segunda mano?
La mayor ventaja de comprar una VPO de segunda mano es el precio de las mismas. Este tipo de inmuebles tiene un precio muy inferior al de cualquier otra vivienda, pero también ocurre que el Estado puede ofrecer ayudas para acceder a las mismas.
Por otra parte, las VPO son de obra nueva, a menos, por supuesto, que la adquieras de segunda mano. Tienen la cualidad de contar con muchas facilidades como parking y piscina. Además, se encuentran en zonas únicas, cerca de colegios, hospitales, supermercados, parques y muy bien conectadas con otras zonas de la ciudad en transporte público.

Sin embargo, las viviendas VPO también tienen sus desventajas. Por ejemplo, una VPO no puede traspasarse en un período mínimo de 10 años, a menos que haya un motivo justificado. Siempre y cuando tenga su calificación, el valor de la misma estará limitado y regulado por la ley. Por otra parte, el Estado tiene preferencia si quiere comprar una VPO de segunda mano, antes que cualquier otro comprador. Por último, el vendedor tiene que devolver las ayudas recibidas.
¿Se puede descalificar una VPO?
Una VPO se puede vender a precio libre siempre que hayan pasado 10 años, y tampoco será necesario contar con permiso para venderla ni devolver las ayudas recibidas. Lo más aconsejable, sin embargo, es solicitar la calificación de la VPO cuando el tiempo prudente haya pasado. La descalificación voluntaria solo pueden pedirla los propietarios de la vivienda cuando haya pasado el plazo señalado en el Plan de Vivienda al que la VPO esté sujeta.
Para esto no solo debe haber transcurrido el plazo, sino que el préstamo obtenido debe haberse amortizado totalmente, así como que se haya hecho la devolución de las ayudas correspondientes, en caso de haberlas recibido. También será necesario abonar las bonificaciones y exenciones que se hicieran en su momento, con intereses.