Cuando vas a comprar un inmueble a través de un crédito hipotecario te surgen muchas dudas. Por ejemplo, cuánto te concede el banco, que no es todo el importe del inmueble; qué otros gastos acarrea este préstamo y, por supuesto, cuánto tienes que pagar al banco de forma mensual. Aquí es cuando aparecen los conceptos de TIN y TAE. ¿Qué es la TAE en la hipoteca? ¿Cómo se calcula? ¿Para qué sirve?
¿Qué es la TAE hipotecaria?
La TAE hace referencia a la Tasa Anual Equivalente. Se trata de un indicador, que se expresa de forma porcentual, para que los clientes que están buscando una hipoteca puedan comparar entre diferentes bancos. Esto les permite establecer una referencia del coste real del crédito hipotecario que ofrecen los diferentes bancos.

Si estás buscando un banco para solicitar una hipoteca y comprar un inmueble, pero no sabes qué banco escoger, entonces ten en cuenta la TAE. ¿Y qué es el TAE en las hipotecas? Se trata de un porcentaje que se obtiene a través de una fórmula matemática y en el que se incluyen los intereses que el cliente tiene que pagar durante todo el tiempo que dure el crédito; así como las comisiones y los gastos asociados a dicho crédito. Cuidado, pues en este indicador no se incluyen los gastos notariales, que se contabilizan aparte.
Recuerda que las hipotecas no solo se piden para comprar una casa, sino que también pueden utilizarse a manera de crédito si se quiere reformar la vivienda. Para los clientes con una vivienda estable y libre de cargas, es mucho más rentable solicitar una hipoteca para reformar dicha propiedad, a solicitar un crédito al consumo.
La TAE sirve para que los usuarios comparen lo que cuesta una hipoteca y es obligatorio que los bancos informen al público sobre dicho indicador. La obligatoriedad de informar sobre dicha TAE la dispone el Banco de España.
¿Qué intereses debo pagar por mi hipoteca al mes?
Ya sabes qué es la TAE en las hipotecas, pero debes tener mucho cuidado, pues este indicador no hace referencia al tipo de interés que tienes que pagar al banco mes a mes. Cuando pides una hipoteca al banco, puede ser de tipo fijo o de tipo variable; en el primer caso, pagarás un importe mensual fijo, generalmente elevado, durante un período de tiempo determinado. Las hipotecas a tipo fijo suelen pagarse antes.
Ahora bien, las hipotecas de tipo variable, como su nombre indica, no tienen una cuota mensual establecida. El importe de dicha cuota varía en función el Euríbor. Además, este tipo de hipotecas tienen la característica de tardar más tiempo en pagarse.
¿De qué dependen las cuotas y los intereses sino es el TAE? Aquí es cuando entra el TIN o interés nominal. El importe que le abonarás al banco mes a mes se obtiene de sumar una parte del monto total del préstamo a devolver cada mes y los intereses de ese período, es decir, el TIN. El TIN es un porcentaje fijo que se pacta, al momento de firmar la hipoteca, como concepto que se va a pagar mes a mes por el dinero prestado. El TIN te especifica cuánto recibe el banco por el dinero que te ha prestado y, a diferencia del TAE en las hipotecas, no incluye comisiones ni gastos.

¿De qué se compone el TAE en las hipotecas?
Los intereses
El interés hace referencia a los beneficios económicos que recibe el banco por prestarte un dinero. Como ya has visto, los intereses pueden ser fijos (se paga lo mismo cada mes, durante todo el tiempo que dure el crédito); y variables (se paga una cantidad diferente según el índice de referencia hipotecario: Euríbor).
Comisiones
La gran mayoría de los créditos hipotecarios y en general, de créditos personales, que ofrecen los grandes bancos, incluyen unas comisiones de apertura o cancelación de crédito. Por ejemplo, si pides un préstamo personal de 4.000 euros el banco te cobrará unos 200 euros por abrir ese crédito. Ese dinero no tienes que pagarlo tú al momento de pedir el crédito, sino que el propio banco te lo descuenta del importe. Esto se incluye al momento de calcular qué es el TAE en las hipotecas.
Descuentos de bonificaciones
Lo más aconsejable es pedir la hipoteca en el banco en el que tengas domiciliada tu nómina, por ejemplo; o aquella entidad financiera en la que tienes cuenta desde hace muchos años. Y es que cuando se calcula la TAE también se incluyen los descuentos que se aplican por bonificaciones que el banco ofrece. Para ser beneficiario de estas bonificaciones tienes que cumplir ciertos requisitos. Cada banco establece sus requisitos; estos pueden ser: ser cliente del banco, tener la nómina domiciliada o ser menor de cierta edad.
Limitaciones de la TAE hipotecaria
La Tasa Anual Equivalente también tiene ciertas limitaciones que debes tener en cuenta al momento de comprar préstamos hipotecarios:
- Comisiones. La TAE no incluye comisiones futuras que el banco podría aplicar una vez que se ha concedido la hipoteca. No se relaciona con las comisiones de apertura.
- Perfil del cliente. Aunque cada banco tiene su propia TAE, no se tienen en cuenta las características de cada cliente. Y es que cuando se concede una hipoteca, el banco hace un estudio para determinar si eres un candidato idóneo. Se base en la edad, en el trabajo, en el importe requerido, la capacidad de pago, etcétera. Es decir, la TAE oficial del banco puede no aplicarse a ti pues esta TAE se basa en el perfil promedio de la población.
- Revisión hipotecaria. Ten en cuenta que en las hipotecas de tipo variable, los intereses no son los mismos cada mes, por lo que la TAE puede cambiar cada vez que se revise el crédito hipotecario.